"El acceso a más información nos permite posicionarnos frente a los clientes de un modo diferente", dijo la Cra. Patricia Marques durante la conferencia "Impacto de las nuevas tecnologías de la información en el asesoramiento tributario".
Marques es socia de PricewaterhouseCoopers Uruguay (PwC) e integrante de la cátedra de Impuestos de la Universidad ORT Uruguay. El evento, organizado por la coordinación académica de Contador Público, se realizó el jueves 10 de mayo de 2018 en la Facultad de Administración y Ciencias Sociales.
Transformación, amenazas y oportunidades
“¿Qué profesiones van a sobrevivir y cómo se transformarán las que lo hagan?”, fue una de las primeras interrogantes que planteó Marques, para quien los estudiantes de hoy “tienen muchas más opciones” de desarrollo profesional. La docente confesó que, a su entender, la carrera de contador mezcla como pocas las materias técnicas y las humanas.
“Uno tiene que hacer lo que le apasiona”, aseguró. “Las carreras son herramientas para ello”, dado que proporcionan la formación y los instrumentos necesarios para salir al ámbito laboral con seguridad. “A algunos les apasiona la medicina, a otros la danza y a nosotros nos apasionan los impuestos”.
“¿Qué tienen de apasionante los impuestos?”, se preguntó. “Los impuestos tienen mucho más de lo que uno se imagina, que es la liquidación del impuesto, porque se trata de personas. Todo lo que nosotros hacemos, lo hacemos con una contraparte”.
“Lo que es el contacto personal no lo vamos a perder con la tecnología”, opinó al referirse a las consecuencias de las innovaciones tecnológicas. Al mismo tiempo, instó a los asistentes a dedicarse al estudio constante. “Estudiar nos da una plataforma para tener herramientas, metodologías y conocimientos para después hacer lo que uno quiere en la vida”.
Para Marques, el desarrollo de la tecnología puede ser visto como una amenaza o como una oportunidad, y personalmente se decanta por la segunda opción. “La tecnología que tengo a disposición va a simplificar algunas tareas para que yo pueda ser más eficiente”.
“La DGI ha hecho un salto tecnológico brutal, pero no quiere decir que tenga menos trabajo”, opinó luego sobre la actividad del organismo. “Hoy sale a inspeccionar con otro nivel de inteligencia previa”.
“No se quedó nadie sin trabajo porque los cuadros de activo fijo empezaran a hacerse en computadora”, recordó en otro pasaje de la conferencia y planteó una pregunta fundamental para los trabajadores del área impositiva: “¿Cómo reformulamos las tareas del contador dedicado a los impuestos para adaptarse a las tecnologías que adoptan sus propios clientes?”.
La confianza y la reinvención del rol del contador
Para Marques, los contadores no verán peligrar su trabajo aunque deberán modificar la forma en que desarrollan sus funciones. “Es una profesión que tiene empleo y empleo variado”, apuntó.
“El asesor tributario es una persona de confianza. El vínculo personal es muy importante”, dijo y opinó que el rol del contador difícilmente pueda ser automatizado, especialmente en empresas complejas. De acuerdo a la experta, el avance de la Inteligencia Artificial (AI) no sería suficiente para asumir el análisis de casos de extrema complejidad, como situaciones puntuales afectadas por tratados de diferentes países.
“Ustedes tienen la obligación de estar aggiornados en estas tecnologías”, dijo a los asistentes. Marques reveló que los medios especializados no pregonan el fin de la profesión de contador, sino que se preguntan cómo reinventarla de cara al futuro.
“Hoy estamos más comunicados que antes y tenemos que entender cómo funciona el mundo”, sostuvo. “Las empresas hoy no trabajan solo para Uruguay”, dijo en referencia a los estudios contables y opinó que esto es posible ya que “los sistemas impositivos [de los países desarrollados] son muy parecidos” y es suficiente con conocer las bases de cada uno.
Marques también se refirió a la existencia de una preocupación global por la tributación de las empresas y, en este sentido, contó que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) tiene como objetivo generar normativa para cuidar la potestad tributaria de los países. Uruguay, aún sin ser miembro de OCDE, se ha acercado a los lineamientos de la organización.
Tecnología, nuevas normas y la reformulación de los modelos
“No todo se va a poder automatizar”, señaló. “Hoy nuestro sistema tributario es bastante complejo”, agregó y contó que las empresas continúan lidiando con la facturación electrónica, principalmente por errores en la parametrización.
Marques dijo que las redes sociales han operado un gran cambio en la forma en que nos vinculamos con los otros. “Hoy nuestro entorno es el mundo entero”, opinó y sostuvo que “el acceso a más información nos permite posicionarnos frente a los clientes de un modo diferente”.
En este sentido, la conferencista señaló que la negociación y la asesoría tributaria son actividades que no serán automatizadas sino actualizadas por la tecnología. “No va a haber una disminución del trabajo: va a haber un cambio”.
Ante este panorama, la carrera de contador deberá ser revisada para adaptarla a los desafíos por venir. “Tenemos que reformular los modelos”, sostuvo y comentó que la especialización se plantea como el camino a recorrer por los estudiantes y contadores del futuro.
“A las nuevas generaciones hay que prepararlas desde el vamos”, dijo. “En el área tributaria las modificaciones son constantes”, contó y reveló que Uruguay se inserta cada vez más en el mundo y se acerca constantemente a la normativa internacional.
Sobre el cierre de la charla, Marques confesó por qué le encantó formarse como contadora y desarrollar su labor profesional: “Contador es una carrera bastante humanista, exige análisis, creatividad y capacidad de debatir con argumentos”.
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