Nicolás Riezler, estudiante de la Licenciatura en Gerencia y Administración, cuenta su experiencia de intercambio en la Universidad Pública de Navarra (UPNA).
-¿Por qué quisiste hacer un semestre internacional?
-Siempre vi con buenos ojos la posibilidad de estudiar en el extranjero, lo consideraba una oportunidad para crecer y enriquecerme desde todo punto de vista. Cuando me enteré de la posibilidad que ofrecía la Universidad ORT Uruguay de cursar un semestre afuera, sabía que ni bien cumpliera con los requisitos que exigía la universidad me iba a postular para el intercambio, y así fue.
-¿Por qué elegiste hacerlo allí?
-En realidad fue una decisión conjunta, pues el intercambio lo hice con un amigo con el cual cursamos toda la carrera juntos. Sabíamos de la gran reputación de UPNA como universidad, y junto con las características de Pamplona como ciudad universitaria fueron argumentos suficientes para convencernos de hacerlo allí.
-¿Cómo fue la experiencia? ¿De qué forma te enriqueció?
-Inmejorable. Fue una experiencia integral, la parte académica terminó siendo un aspecto más dentro del semestre, y no el único. Tuvimos que adaptarnos a una vida bastante diferente, conocimos gente y lugares de los cuales aprendimos mucho. Nuestra cabeza y la forma de ver y encarar las cosas realmente cambió durante este viaje.
-¿Cómo te resultó el nivel de exigencia? ¿Te sentiste preparado para estudiar allí?
-El nivel fue similar al de la Universidad ORT Uruguay, incluso la metodología de enseñanza tenía varias aristas en común. Particularmente la adaptación a la vida académica no me resultó difícil.
Los profesores y coordinadores estaban abiertos a ser contactados fuera de horario, para evacuar dudas sobre algunos aspectos formales a los que no estábamos acostumbrados. Por suerte los resultados académicos al final del semestre fueron positivos.
-¿Qué materias cursaste? ¿Por qué las elegiste?
-Cursé cuatro materias, pero este no fue un número aleatorio. Si bien a diferencia de Uruguay no íbamos a estar trabajando en paralelo a los estudios, queríamos encontrar un equilibrio que nos permitiera tener tiempo ocioso para hacer otras actividades.
Elegimos las materias en base a los programas que nos interesaron más, y una vez elegidas, nos cercioramos con el coordinador de nuestra carrera en la Licenciatura en Gerencia y Administración que esas asignaturas cumplieran con las características para poder ser revalidadas. Estas fueron:
Dirección Estratégica y Política de la Empresa
Diseño y Comportamiento Organizativo
Imagina tu Empresa
SAP – Temas de Gestión de Empresas
-¿Cómo era tu vida durante el intercambio? ¿Cuánto tiempo estuviste?
-Estuve 5 meses en España, de agosto a diciembre del 2011, y una vez culminados los cursos, fui a pasar las fiestas a Austria a la casa de familiares, para finalmente regresar a Montevideo a mediados de enero.
Durante la estadía en Pamplona, alquilamos un apartamento a unos 15 minutos de la universidad, donde nos alojamos todo el semestre. Los cursos se dictaban de lunes a jueves por la mañana, por lo que muchas veces disponíamos de 3 días para hacer algún viaje u otra actividad.
El tiempo fuera de clase lo compartíamos generalmente con otros extranjeros cuya situación era similar a la nuestra, y con quienes generamos muy buenos vínculos.
-¿Qué tipo de relaciones generaste durante tu estadía?
-Los contactos y amistades que uno genera en este tipo de circunstancias, son lo que uno termina valorando más. Una semana antes de comenzar los cursos, la universidad reunió a todos los extranjeros que íbamos a estudiar allí durante ese semestre, donde me llamó la atención que éramos muchos y que veníamos de diferentes partes del mundo.
Y ese fue el puntapié inicial para establecer relaciones con muchos de ellos, con los cuales viajamos y compartimos muchas otras actividades, y con quienes sigo en contacto hasta el día de hoy.
También generamos vínculos con varios "locales" (personas del lugar), algunos inclusive que habían estudiado en la Universidad ORT Uruguay un par de semestres antes; con ellos compartimos muchos momentos.
-¿Pudiste viajar a otros lugares? ¿A cuáles?
-Las facilidades que ofrece el transporte en Europa junto con las cortas distancias, hacen que si uno se organiza bien, pueda viajar.
Dentro de España viajamos y conocimos mucho: Barcelona, Madrid, Sevilla, Córdoba, Granada, Toledo, Valencia, Zaragoza y las tres provincias Vascas.
Luego estuvimos en Sicilia (viaje que surgió por el buen vínculo que generamos con un grupo de sicilianos en UPNA), en el sur de Francia y en Ginebra. Una vez finalizados los cursos y luego de las fiestas, pude conocer algunos destinos más en Europa.
-¿Qué fue lo que más te llamó la atención durante tu estadía en el exterior?
-Al principio, el cambio es brusco y hay que adaptarse rápido, es todo nuevo, pero con el paso de los días uno va apreciando detalles y empieza a disfrutar.
Es cierto que son ciudades que cuentan con la infraestructura y los recursos para funcionar a la perfección, pero la gente es lo que más llama la atención: la tolerancia, el respeto, la practicidad y sentido común que aplican para tomar todo tipo de decisiones.
